Cómo cambiar de compañía de seguro de decesos y qué pasa si lo hago

Sí, un cambio en tu lugar de residencia puede afectar al coste de tu seguro para convertirlo en uno más caro o en uno más barato. Por ejemplo, si lo contrataste cuando vivías en Madrid y ahora te has trasladado a un pequeño pueblo de Almería, el precio cambia porque los costes asociados al sepelio son diferentes. Esto mismo también ocurre en otros seguros como el del coche, el del hogar o el seguro médico.

Al cambiar de compañía de seguro de decesos el encargado de tramitar la baja es el asegurado. Para ello es necesario que envíe un escrito a la aseguradora indicando sus datos personales y el número de la póliza que quiere anular. No es necesario decir los motivos de la cancelación pero sí es imprescindible hacerlo en el plazo establecido: al menos un mes antes de la fecha de vencimiento.

Mi consejo es que una vez que has enviado el escrito esperes un par de días y llames a la aseguradora. Es una buena forma de asegurarte de que el proceso está marcha y de evitar futuros problemas.

Sí, si te vas a otra compañía ni el capital asegurado ni lo que ya hubieras pagado va contigo. Existe la falsa creencia de que un seguro de decesos funciona como una hucha donde el asegurado mete dinero que luego le sirve para pagar el sepelio y, sin embargo, la realidad no es esa. Igual que ocurre con el resto de pólizas, lo que el asegurado paga pertenece a la aseguradora y no a él.

Sí, no temas a la hora de cambiarte de compañía de seguros de decesos si es para mejorar tus condiciones, el precio y las coberturas incluidas. Aquí es importante que mires la póliza de decesos como un seguro más, donde vas pagando un dinero cada año, pero que en ningún caso puedes recuperar, tal y como ocurre en los seguros de vida, de coche o para tu hogar.

No, no hay ningún problema y puedes hacerlo siempre que lo consideres. Lo más importante es que te cambies de compañía en los plazos establecidos y siguiendo lo que la legislación marca: por escrito y con al menos un mes de antelación respecto al vencimiento. Mi consejo es que antes de comunicar la baja a tu aseguradora tengas ya elegida una nueva compañía.

Sí, claro que vale la pena cambiar de compañía de seguro de decesos siempre que te sirva para conseguir un mejor precio y, sobre todo, unas coberturas de calidad. No tengas miedo a cambiarte de seguro porque funciona de la misma forma que un cambio en seguro de salud o en el seguro de moto. Eso sí, asegúrate de que el cambio además de para mejorar el precio, te ayuda a conseguir las coberturas que deseas.

Sí, puedes cambiarte de seguro de decesos sin perder antigüedad porque no hay para este tipo de pólizas. Aunque existe la creencia popular de que estos seguros tienen una antigüedad que beneficia al asegurado en algún momento, la verdad es que es irreal y no está disponible en ningún caso.

Nada, al cambiar de compañía de decesos no pierdes absolutamente nada. Es verdad que si te marchas a otra aseguradora pierdes el dinero pagado, pero quedándote en la misma toda la vida también lo vas a perder porque el dinero que has pagado es de la aseguradora y no tuyo.

Es mentira que el seguro se ocupe de guardar el dinero que pagas para después desembolsarlo en el pago de tu entierro. Recuerda: en ningún caso es posible recuperar el dinero abonado en forma de prima ni en tu seguro de decesos ni en otros.

El dinero que has ido pagado mientras tu seguro estaba en vigor se lo queda la aseguradora...igual que pasa en el resto de seguros que se comercializan. No es posible recuperar el dinero abonado en ningún caso.

Existe un pensamiento generalizado de que los seguros de decesos funcionan como si fuera una cuenta bancaria donde se acumula el dinero que pagas. Así, luego la aseguradora puede invertir ese dinero en tu entierro. Nada más lejos de la realidad porque los seguros de decesos no funcionan así.